
Veinte años después de su creación, el recinto de Cabueñes del Parque Científico Tecnológico de Gijón (PCTG) se ha consolidado como un espacio de concentración de empresas y actividades innovadoras. Hoy, sin embargo, se encuentra próximo a su capacidad máxima, debido al agotamiento del espacio disponible.
Resulta, por lo tanto, bastante oportuno iniciar un proceso de ampliación, con el objetivo de seguir ofreciendo un espacio atractivo para empresas de los sectores científicos y tecnológicos, reforzando la entidad del distrito y alineándolo con una estrategia de promoción de las actividades económicas vinculadas a la innovación en ciencia y al desarrollo tecnológico, sectores que suponen ya un alto porcentaje del PIB de Asturias.
Un campus, una pieza de ciudad
El distrito urbano “Gijón Milla del Conocimiento – Margarita Salas”, en el que se localiza el ámbito de actuación, está situado al este de la ciudad dentro de su franja periurbana de la ciudad. Ahí existe ya una potente implantación de usos empresariales, docentes, culturales y dotacionales: La Universidad Laboral, la RTPA, el Centro de Arte y Creación Industrial LABoral, el PCT de Cabueñes y el INTRA, el Hospital Universitario, el Campus Universitario de Gijón, la UNED y el Jardín Botánico Atlántico.
Todos ellos configuran un ecosistema de innovación en el que la nueva implantación refuerza la vertiente empresarial, pero sin descuidar la oportunidad de establecer servicios complementarios a través de las compatibilidades de uso, que contribuyan a reforzar la excelencia del conjunto y creen sinergias con las actividades desarrolladas en el resto de la Milla; definan complementariedades respecto a la movilidad e interacciones de todo tipo, y se configure, al mismo tiempo, como una pieza de ciudad integrada en la trama urbana.

Para ello, la propuesta, desarrollada junto a Rueda y Vega Arquitectos, integra los caminos existentes, creando una red de itinerarios verdes que respeta el arbolado prexistente y establece un conjunto de conexiones peatonales y en bicicleta entre las distintas piezas y con el resto de la ciudad. Así mismo, se fomenta la articulación y conexión con el conjunto de la Milla, disponiendo nuevos cruces y pasos peatonales.
De esta manera, el conjunto propuesto gravita en torno a un eje principal que parte de la actual rotonda en la Avenida de la Pecuaria y penetra en el ámbito hacia el norte, buscando la continuidad con la zona residencial de Somió, en un modelo de campus, abierto, caminable e integrado con el tejido en el que se inserta.
Organización y estructura interna

La pieza resultante, al Oeste del eje principal, se organiza en forma de anillo, en torno a un gran espacio verde, con el que se busca fomentar dinámicas de innovación, a partir del encuentro y la interactuación. Sobre este espacio gravitan las distintas piezas de la zona oeste. Estas se plantean como parcelas uniempresariales, siguiendo el modelo del PCT de Cabueñes, pensadas para venta a empresas que construirán su edificio conforme a sus necesidades.
Cabe destacar también que la pieza situada más al oeste, a ambos lados de la Avenida de la Pecuaria, se configura como “puerta” del conjunto, con piezas urbanas que enfatizan esta condición.
Por su parte, el perímetro norte presenta viarios compartidos con la zona residencial colindante, buscando una integración entre viviendas y oficinas características, fomentando la aparición de edificios de baja altura para minimizar el impacto; se plantean además usos perfectamente compatibles, con un el bajo impacto de las actividades previstas, permitiendo configurar una pieza de ciudad integrada y alejada de la idea de recinto.
Otro eje, perpendicular al principal, extiende la ordenación hacia el Este, ofreciendo una continuidad con el parque y la Carbayera de Candenal. Entre este camino y la Avenida de la Pecuaria se localizará otro conjunto de manzanas de uso empresarial y dotacional, que respeta la arboleda existente.
Integración paisajística
En la concepción del nuevo PCT, se apuesta por la excelencia ambiental, definiendo una ordenación que fomente el protagonismo de los elementos de la infraestructura verde, con presencia de vegetación endógena en sus diferentes estratos (herbácea, arbustiva y arbórea) y la integración de las preexistencias naturales: un proyecto donde el respeto al paisaje ya existente se convierte en parte esencial de la propuesta.
El objetivo es generar una red de espacios libres y zonas verdes relacionadas con el entorno y los activos naturales, y que al mismo tiempo fomente espacios de actividad en contacto con la naturaleza, tanto para las personas que trabajen ahí como para las que habitan los tejidos próximos.
Red de espacios verdes
Así, en el borde noroeste del ámbito, a lo largo del Camino Cinamomos, se define un espacio verde que busca servir como transición entre la zona residencial y el nuevo PCT. Su uso, por ello, está orientado a la población residente como zona de paseo, con un sendero que transcurre paralelo a la calle entre vegetación, alternando zonas de diferente densidad, con mobiliario para sentarse a descansar, leer, etc.
Transversal al ámbito, desde la conexión con la Avenida de La Pecuaria al oeste hasta el acceso al este por la puerta histórica de la antigua Estación Regional Pecuaria de Asturias, se planea la Vía Verde de La Pecuaria, un eje de más de medio kilómetro que atraviesa los principales espacios públicos del ámbito (el Ágora Verde, la Senda de las Gardenias y el Jardín de la Pecuaria) y que articula la movilidad peatonal y el acceso a gran parte de las parcelas del sector.
En la parte oriental, se recupera para el conjunto el antiguo Jardín de la Pecuaria, parte de la antigua Quinta del Duque, que se potencia como elemento clave en la identidad de la actuación y que sirven como base para el diseño de los recorridos y programas que se integran en este espacio público. Además de la puesta en valor patrimonial, las áreas verdes propuestas se apoyan en los vestigios naturales y constructivos de los jardines ya existentes.

Sostenibilidad, equidad social y diversidad urbana
Un modelo urbanístico sostenible debe evitar espacios de concentración monofuncional, fomentando una mayor utilización del espacio urbano por parte de la ciudadanía. Se deben atraer servicios y equipamientos que den sentido al ámbito más allá del final de la jornada laboral, por eso se presta espacial importancia a los espacios de encuentro. Además, el uso empresarial se completa con otros programas complementarios. La intención de este modelo es plantear un nuevo tejido urbano que apoye la conciliación de la vida laboral, familiar, personal y comunitaria, así como el buen desarrollo de las tareas cotidianas y de cuidados, tanto de las personas que acudan al Parque Científico-Tecnológico como de las habitantes de los tejidos residenciales colindantes.
Se propone para ello una ordenación que fomenta la mezcla de usos (comercial y de servicios, empresarial y dotacional) y se crean nodos de actividad de proximidad. Las dotaciones propuestas son, principalmente, espacios deportivos y una guardería, que ayudan a esa conciliación de lo personal y lo profesional en el ámbito; además, se reserva suelo para otras posibles, como un Centro de Salud, siguiendo, de nuevo, la idea de pensar el proyecto como un trozo más de ciudad.
A nivel arquitectónico, las tipologías edificatorias y soluciones inmobiliarias planteadas responden a la demanda actual de las empresas de innovación, que en muchas ocasiones no buscan solares donde implantar un edifico aislado, sino que apuestan por espacios construidos donde instalarse, frecuentemente de forma temporal y con flexibilidad para asumir variaciones en su estructura. Se plantean, por ello, piezas en las que un operador inmobiliario pueda generar soluciones en alquiler para distintas empresas, compartiendo espacios y servicios comunes.
